La Republica, la constitución y la Democracia. Carta al Socialismo.
Estimado Socialismo, evidentemente en los tiempos actuales hay que sincronizar estos tres términos para poder entrar a la prosperidad. Aunque existen naciones con sistemas anárquicos y se catalogan prósperos, estos a su vez no se pueden considerar democráticos a no ser que tengan un sistema de elecciones independientemente de la existencia de un soberano. En el caso de Cuba, se puede considerar Republica y a su vez constitutiva, pero no democrática. Desde el 20 de Mayo de 1902 se considera a la nación como una república constitucional y en esta materia se fue desarrollando y modificando su constitución en 1940, 1976 y 2002. Hoy se lleva a cabo por parte de los “más inteligentes” del país, o sea, el extracto de la mentalidad revolucionaria, un proyecto de constitución que será propuesto en un referéndum en toda la nación. Yo a usted lo conozco personalmente y se cómo es y que hace.
Pero no nos alejemos de los tres conceptos que arriba dan título a este pequeño artículo. Si en este nuevo referéndum usted propone al pueblo artículos referentes a la existencia de libertad de expresión, de reunión y de asociación porque entonces usted tiene, estimado socialismo, en sus cárceles personas confinadas por su forma de pensar. La república que persista en tener en sus cárceles presos políticos no es democrática. La constitución que se viole por el propio gobierno que la promulgue es falsa como lo es el propio Gobierno. Los cubanos necesitamos un país libre de pensamiento y acción. No es posible que usted quiera obligar a 11 millones de cerebros a pensar como usted, a reunirse y pertenecer a las organizaciones y asociaciones que usted quiera, a infundir miedo en el individuo porque lo que quiere este expresar no está a tono con lo que usted quiere que el exprese. Eso lo hacen las dictaduras.
Tiene que recordar, decadente socialismo, que tres millones de cerebros se han alejado de la república, precisamente por la existencia de un Gobierno que muchos consideran dictatorial. Usted es un sistema que le ofrece muchas oportunidades a la corrupción, precisamente por su régimen político, económico, financiero y salarial. Un primo suyo nacido en 1917 se vio obligado a cambiar de carácter en 1989, debido a estos errores, inherentes a su creación teórica. No se puede negar que en los libros usted es una belleza y encarna la más transparente de las justicias. No así en la práctica, cuando vemos en unos de sus postulados que afirma que TODO ES DEL PUEBLO y en la práctica el pueblo no tiene nada.
Usted estimado y decadente Socialismo, lo que hace usted es atrasar el desarrollo del país, fomentar y ejecutar leyes que destruyen la libertad, la democracia y el desarrollo económico. Usted paga una miseria al trabajador y es dueño de toda la infraestructura económica de la república. Le comunico hermano que a usted millones de cubanos no lo quieren. Usted tiene los bancos llenos de dinero, resultado de tanta explotación a los trabajadores. En su interior está abarrotado de deficiencias, que no puede ni sabe resolver. Los hospitales, el transporte, las alcantarillas, el salario, los precios por la nubes, inflación, hambre, persecuciones, vigilancia, detenciones políticas, mala alimentación, atraso, destrucción de las pocas fabricas que le quedan, desempleo y tantas cosas señor Socialismo, que usted, para serle sincero, usted debería guindar los guantes antes de acabar de enterrar a esta nación.
Pero le digo más, lo peor que usted tiene mi alocado sistema es que no da lugar a la democracia, a la existencia de grupos humanos que tengan otro pensamiento, que le critique sus errores, que no permite más partidos políticos y sobre todo que persigue, vigila, detiene, enjuicia y confina a todo aquel que le cae mal por sus ideas políticas contrarias a la suyas. Revise sus postulados y sus apegados principios porque por el camino que usted está llevando a estos 11 millones, no creo que encuentre la prosperidad. En conflicto con el vecino del norte, pendiente de todo lo que hace, revisando sus latones de basura y criticándolo sobre todas las cosas, pero recibiendo de él las remesas, las recargas telefónicas y de la internet esta siendo usted oportunista e hipócrita en el más amplio sentido de la actuación. ; repartiendo lo poco que tiene a viejos socios que nunca le han ayudado y acabando con las cuatro fábricas que le quedan a llegado usted a la ruina, dejandose conducir por el pensamiento y actuar de un hombre.
Comentarios
Publicar un comentario